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Esta tercera entrega de la saga comienza con Clary deseando ir con los Lightwood a Idris, con el objetivo de encontrar una cura para el sueño en el que está sumida su madre. Lo primero que adoré de este libro fue que por fin conocemos Idris, la ciudad por excelencia de los cazadores de sobras, la cual admiran y veneran. Veremos su capital, Alacante, con sus altas torres de los demonios, los prados de las afueras y la presencia de la famosa Clave, de la que no paramos de escuchar hablar, pero ahora por fin podremos saber cómo es asistir a alguna reunión suya. La ambientación me ha encantado, no os voy a mentir, además de visitar la vieja casa donde vivía Jace, y también me gustó mucho el carácter que se le da al Espejo, el tercer y último de los Instrumentos Mortales (ya que tuvimos conocimiento de la copa y de la espada en los libros anteriores). En este libro también contaremos con nuevos personajes. Destaco a Aline, una joven un tanto directa, que mostrará un interés especial por Jace, y a Sebastian, su primo, el cual estará más que encantado de enseñarle la ciudad a Clary. Sebastian es un joven apuesto, simpático, que realmente reside en Francia, pero ha ido a Idris de visita dada la gran amenaza que supone Valentine. También conoceremos al nuevo Inquisidor, que a simple vista parece simpático (esos son los peores) y al mismísimo Cónsul, al que no he soportado en ningún momento. A su vez, me ha gustado mucho conocer a Amatis, la hermana de Luke y la que fue la primera esposa de Stephen Herondale, la cual no actuó bien en su momento, pero ahora parece haberse ubicado un poco y nos da hasta cierta pena. Me gusta que poco a poco se vayan incorporando personajes que podemos entrelazar con otros conocidos anteriormente e ir relacionándonos, ya que de algunos tenemos una información muy reducida en los libros anteriores y poco a poco vamos componiendo su historia gracias a pedacitos que nos van contando. En los protagonistas no parece haber muchos cambios. Isabelle sigue siendo una guerrera de los pies a la cabeza, muy protectora con su familia, pero me gusta que en este libro se muestre más cariñosa y que se sincere con Clary, con la que parece estar forjando una buena amistad. de Alec, destaco que se le ve más adulto, tenso debido a la situación que están viviendo, pero con mucho más coraje, me ha encantado su nueva actitud con Magnus, ya era hora de que espabilara. Simon en esta entrega se ha ganado mi respecto, y es que aunque no termine de gustarme, esta vez hace varios sacrificios y se pone en peligro solo por la gente a la que quiere. Me quito el sombrero ante él y me da mucha curiosidad saber qué pasará con la marca nueva que lleva puesta, qué implicará eso en su vida. Jace tendrá muchas crisis existenciales a lo largo de la lectura, y es que no es para menos, teniendo en cuenta los descubrimientos que se hacen. al principio se comporta como un idiota, parece que le encanta actuar así a veces, pero luego tiene momentos en los que consigue que se nos caiga la baba con él. Si es que es de mis personajes favoritos por algo. Clary será una pieza clave por varios motivos. Reconozco que me ha puesto muy nerviosa en algunas ocasiones, porque no hace caso de los demás y actúa sin pensar, de manera demasiado impulsiva, poniendo en peligro a sus allegados. No es consciente de las consecuencias que pueden acarrear sus actos, y eso se ve desde el principio hasta el final del libro. Eso sí, me gusta que sea entregada y no quiera quedarse de brazos cruzados, que reúna el coraje suficiente para plantarse delante de gente importante para poner un poco de orden y luchar por lo que es correcto, y también el desarrollo de su habilidad, que es maravillosa y da mucho juego. De los personajes secundarios, continuaremos con Magnus rondando por ahí, que es la bomba, siempre está cuando se le necesita, tiene comentarios muy divertidos y encima adoro sus escenas con Alec. Luke también tendrá sus momentos en esta entrega, se apreciarán sus dotes de liderazgo y su valentía, cosa que ya había demostrado antes, pero en este libro lo vemos como un auténtico líder y sin miedo a lo que puedan opinar de él los cazadores de sombras. Otro personaje que tiene sus cameos es Raphael, el cual no sé si está de nuestra parte o no, es un personaje que me gusta porque nunca sabemos por dónde va a salir y siempre pone precio a su ayuda. Creo que en esta novela es en la que más se aprecia hasta donde puede llegar la arrogancia de los cazadores de sombras. Sí, son personas que están para proteger al mundo de los demonios y son leales y grandes luchadores, pero seamos francos, se creen la élite y prefieren plantearse morir antes que colaborar con los subterráneos. Son clasistas a más no poder, aunque esta vez tengan que plantearse dar su brazo a torcer debido a la situación. de hecho, me gustó ver algunas ocasiones donde lograron trabajar cazadores de sombras y subterráneos codo con codo, fue muy emocionante, aunque sigo pensando que queda mucho trabajo por hacer si quieren que esa cordialidad sea sincera. Le he dado la máxima puntuación porque lo he disfrutado como una enana. Sin embargo, he de comentar unos fallos de los que soy consciente. El primero es un fallo de edición, porque en algunos momentos se lee "Sebastian" y en otros "Sebastián". Estaría bien que se decidieran por alguna de las dos formas, no es cómodo leer unas veces una y otras veces otra. El segundo es, básicamente, lo repentino que es el acercamiento de Sebastian y también su comportamiento, como que sucede muy rápido su fijación por Clary, que está totalmente justificada, pero podría haber sido un poquito más disimulado, teniendo en cuenta lo que está en juego. Además, en este libro vemos la amenaza que supone Valentine en todo su esplendor. Lo manipulador que es, hasta donde llega su ambición y la locura que posee su mente, pues lo peor que es que realmente cree que lo que está haciendo es por el bien de los cazadores de sombras y que él es casi como un salvador. Es sorprendente y aterrador lo que fue capaz de hacer con sus hijos y allegados, ya que por fin se nos revelan todos los secretos y los datos como son en realidad y todo hace "click" en nuestra mente. Da repulsa saber todo lo que hizo Valentine, y también sus intenciones en la actualidad. Con respecto al transcurso de la historia, hay mucha acción, pero también momentos muy emotivos, tanto en el buen sentido como en el malo. Hay una muerte en concreto, que, aunque no fuera de un personaje muy conocido, duele y da una impotencia increíble. Y el final me pareció perfecto, simplemente un gran cierre para la trama que lleva abierta tres libros. La saga se compone de seis libros. No obstante, este tercero queda con un final cerrado, para los que no quieran continuar con la historia o quieran darse un descanso, aquí es donde pueden hacer una parada. Yo seguiré leyéndola, por supuesto. Enlace: https://adictaloslibros.blog.. |
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