El juego de los cementerios

Esta es una de esas novelas que se leen con placer en cualquier lugar.
Nadie puede negarme que la persona lectora, a menudo es un “animal” que en muchas ocasiones actúa por impulsos y uno de esos impulsos es lo que me ha llevado a ponerme delante de la nueva obra de Clara Peñalver. Una foto, un título llamativo y singular desde la conjunción o simbiosis de palabras de ámbitos tan diferentes como juego y cementerio, que acarrean una parada obligatoria a mirar la parte de atrás en busca de su sinopsis, donde la novela capta a los que aún podían ser escépticos y auguraban pasar de largo, dudando si entregarse a ella buscando el mejor rincón donde disfrutarla. Todo lo anteriormente dicho se puede resumir diciendo que cualquier amante del thriller tiene ante sí un reclamo a embarcarse en una historia y un misterio novedoso.
Una lectura que ha sido una constante hemorragia de sensaciones porque creo que no estamos ante el típico thriller mediático con mucha sangre, muchos muertos y un misterio que asfixia, en mi opinión Clara Peñalver huye de los tópicos y se complica la vida en dotar a sus personajes con un protagonismo personal muy fuerte y con mucho peso dentro de la novela, tanto que algunas veces, la historia principal quedará atrás, apartada para retomarla en otro momento a favor de historias secundarias que deberemos llevar en nuestra mochila si queremos viajar por ella con su protagonista.
A pesar de que la sinopsis nos deja bien a las claras el argumento de la novela, para mi sorpresa la historia de Ada Levy no es sólo lo que nos auguran. Una chica que en la anterior novela (se pueden leer independientes) se enfrento a un asesino en serie, en esta se ha sacado su titulo de investigadora privada y tras un trabajo para la revista moter@s donde trabaja, descubre por casualidad unas tumbas idénticas y con la misma inscripción en varios cementerios repartidos por la geografía española. A partir de ahí, Ada se verá envuelta en un misterio mayor de lo que ella esperaba, una relación de pareja que le será difícil controlar y fantasmas, muchos fantasmas de su pasado unidos a los quebraderos de cabeza que tendrá con su presente y la gente que le rodea y a la que aprecia.

Llegado a este punto podemos observar que nos espera mucha carnaza para encontrarnos con un primer capítulo turbio, que nos desata cierta impaciencia por encontrar los primeros compases de la historia, lo que verdaderamente nos adentra en las profundidades de un misterio que se desea, que se intuye, pero que se hace esperar hasta un segundo capítulo donde tendremos nuestro premio y es que lo bueno de los tiempos de esta novela esta en su ritmo, la autora nos da ingredientes para engancharnos a ella para luego ralentizar la escena y en el momento justo cuando ya empezamos a reclamar más acción, ella vuelve a darnos la dosis justa de entusiasmo para que podamos sobrevivir a la próxima entrega.

Con un lenguaje que transmite la angustia de los personajes, escenas bien elegidas para apoyar unos diálogos que de por si son muy amenos, la autora consigue que le otorgue mayor realismo y es que parece que Clara Peñalver maneja la pluma de una forma sencilla y ágil, lo que hace que empatizar con sus personajes sea tarea fácil y eso es seguramente lo que busca la autora que le prestemos la misma atención a sus marionetas que a la historia en la que se desarrollan.
Clara ha realizado un trabajo bastante arriesgado del cual creo que ha sabido salir con nota alta, no es fácil conjugar tantos componentes como quedan plasmados en su novela, encajar a las mil maravillas una historia de amor, con una tensión sexual entre sus protagonistas que por segundos ha hecho subir la temperatura de la habitación donde me encontraba leyendo, revolucionando mis hormonas, y más merito si cabe, cuando suelo ser muy crítico con las escenas eróticas en las novelas donde suelo resbalar. Chapo para Clara que me ha hecho sentir en esos fragmentos y eso tiene su merito.

Otros momentos que introduce con maestría son los musicales, un recurso que últimamente ha encontrado en varias novelas y no puedo negarlo me tienen ganados. Esto una vez más me ha permitido añadir a mi biblioteca musical un par de canciones que desconocía y que aúnan a la pasión de la literatura, la de la música que tan bien sienta cuando se mezclan con acierto. Es rescatando de nuevo la idea que antes comente, un libro lleno de situaciones, frases, escenas e ideas para la reflexión propia. Ada, nos demuestra con estas reflexiones que la vida no es tan fácil como cualquier testigo que lo ve todo desde fuera puede pensar.

Si tengo que dejar un comentario final, creo que este libro se saborea con su lectura, pero se disfruta realmente cuando se termina y se analiza la historia en conjunto. Creo que me adentre en esta historia buscando un thriller a la antigua usanza y he terminado rindiéndome a la gran facilidad de su autora por mezclar la novela más negra y lúgubre con momentos de colores y olores que uno termina palpando

Enlace: http://librosenelpetate.blog..