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Inglaterra, 1932. Violet Speedwell es una solterona, una de las mujeres "sobrantes" después de la I Guerra Mundial. Su prometido murió en el frente y ahora se ve obligada a buscarse la vida por su cuenta, en un mundo que no está pensado para mujeres solas. A través del día a día de Violet conoceremos las dificultades a las que se enfrentaron estas mujeres: la precariedad de sus nimios sueldos, la condescendencia (cuando no desprecio o suspicacia) con las que las trata la sociedad, el sentimiento de no haberse realizado como mujeres, la añoranza de lo que podría haber sido... En este mundo de hombres, Violet encontrará refugio y propósito vital entre las bordadoras de la catedral de Winchester. Unirse a este grupo cambiará su vida para siempre. El sentimiento de pertenencia, el hecho de estar haciendo algo que perdurará más allá de su propia vida, y descubrir su propia capacidad de aprendizaje hará que Violet empiece a hacerse valer frente a los convencionalismos, y a luchar por mantener su pequeña independencia frente a los demás. Es una novela intimista y melancólica, bien documentada (uno de los aspectos que más me gusta de Tracy Chevallier) y que incluye varias referencias a Jane Austen, enterrada en la catedral de Winchester, donde la protagonista borda. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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