Nick

Dafne tiene solo 12 años y está enamorada de uno de los malotes del barrio. Para provocar su interés crea un perfil falso en Facebook, algo que se volverá en su contra cuando alguien desconocido contacta con ella, aprovechando el anonimato que ofrecen las Redes Sociales.

Llegué a esta historia, dirigida a un público (pre)adolescente, por pura casualidad. Escrita con lenguaje sencillo y cercano, muestra una de esas situaciones contra las que prevenimos a nuestr@s menores y que les parecen exageraciones de personas adultas: el peligro de revelar datos personales en la web, de entrar en contacto a través de Internet con gente a la que no conocemos y la alta probabilidad que hay de que nos estén dando información que no es real. Con todo lo que ello conlleva.

Aunque han pasado ya unos años desde su publicación en 2011, la situación que relata Nick es perfectamente creíble y puede darse en cualquiera de las Redes Sociales que hoy manejamos (manejan). Máxime cuando cada día es mayor el afán por mostrar todo aquello que hacemos, añadiendo incluso información sobre otras personas que quizás no desean estar expuestas. Y que permiten a alguien con no muy buenas intenciones recopilar información sobre nosotr@s y nuestro entorno.

Estoy convencida de las bondades de las RRSS pero también de su peligro, por eso limito mucho la información que hago pública. Creo que esta es una muy buena lectura para recomendar a chaval@s en los primeros años de Instituto, porque más vale prevenir.

¿Estás de acuerdo con el mensaje que transmite este libro?
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