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Este es el séptimo libro de Virgin River. Sigo bastante enganchada a esta serie que espero poder leer al completo. En la sinopsis aparecía que los nombres de Rick Sudder y Dan Brady, pero no sabía exactamente que iba a encontrarme en esta novela. En las anteriores Rick estaba con Lizzie y no sabía quién era Dan Brady. Para mí ha sido una de las más misteriosas al principio porque hablaba de todas y cada una de las parejas que ya conocíamos de las novelas anteriores pero no terminaba de ver a los personajes principales como tal. Luego ya sí, y no quiero escribir mucho más porque no quiero revelar nada. Es ligeramente diferente a las que ya había leído anteriormente y ha sido difícil leer sobre todo al personaje tan atormentado que es ahora Rick, teniendo en cuenta que lo conocemos desde la primera novela. Y ha sido muy curioso conocer a Dan Brady, un personaje que aunque ya había aparecido a lo largo de todas las novelas no se sabía el nombre. Volver a ver a todos los demás merece la pena. Ver como siguen Jack, Mel, Brie, Predicador, Paige, Mike, Luke, Shelby, Alt, Paul, Hope... Y sobre todo, me ha encantado ver como se desarrollaba la historia de Cameron, que fue algo que se me quedó pendiente en la novela anterior y me ha encantado. El octavo libro de Virgin River es "A este lado del paraíso" y los antecedentes de dicha trama están en esta novela. Un personaje, que os podéis imaginar cual si ya habéis leído las anteriores entregas, ha comprado la Iglesia que está cerca del bar de Jack y la ha puesto en venta en eBay. Tal cual. Ha sido un gran momento y aunque no tiene nada que ver con la trama de esta novela, si era necesario para la siguiente. Me encanta como lo ha enlazado todo la autora. |
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