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Mezcla de novela de suspense y de recreación histórica, es un buen libro cuando trabaja sobre la ambientación y las circunstancias de la vida en Nueva York de finales del siglo XIX pero flojea en la trama de suspense y en alguno personajes que resultan muy poco creíbles.Un conjunto de personajes demasiado avanzados para su época a los que les salen las cosas demasiado bien, teniendo en cuenta las dificultades a las que se enfrentaban.Le sobran páginas para contar una historia de psicópatas y perseguidores al estilo de Mentes Criminales del s XIX con cierto regusto Jack el Destripador versión neoyorquina y deja la historia un poco coja en su resolución, pero es un libro bien escrito que gustará a los amantes de las narraciones victorianas.
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