El alienista

El alienista de Caleb Carr, sin duda me ha dejado impactada, debo confesar que encontré este libro por casualidad, después de ver los primeros capítulos de la serie que lleva el mismo nombre, la forma en la que te atrapa y te hace llegar a ese Nueva York de 1896, cada una de las descripciones del lugar es perfecta, me hizo formar parte de esa época, imaginar la forma en la que las distintas clases sociales vivían, con este libro aprendí sobre el comportamiento de diferentes personales, me hizo analizar, querer investigar y fijarme en cada uno de los pequeños detalles que me rodean, sin duda después de leerle he apreciado más el estilo de vida que tengo, tanto la compañía y apoyo de mis padres como sus consejos y regaños, darme cuenta de que jamás fueron malos al contrario solo me protegían, porque un padre realmente malo, destruye, destruye de la manera más cruel a quien debería amar por el hecho de formar parte de sí.
Llore, llore con cada una de las muertes, bueno algunas no, algunas me hicieron desearlas, fue tanta la forma en que me adentre que llegue a querer ser el asesino en algunos aspectos, no para martirizar a esos pequeños niños que no tenían ninguna culpa, sino para terminar con la existencia de algunos personajes, no diré cuales, no, es mejor que lo descubras tú mismo.
Confieso que aun cuando ya sabía de qué trataba, volvemos a reafirmar que una serie o película se queda a la nada respecto al libro, a pesar de conocer la historia completa, el libro me abrazo, me impresiono, logro sorprenderme siempre en el momento menos indicado.
El alienista es un libro con un gran valor, no solo como novela policíaca, cuando lo leas, te darás cuenta que no es como muchos libros, centrándose en el asesino, sino que toma diversos temas, con el aprendí mas sobre historia, sobre comportamiento humano, sobre valores y sentimientos, eso si nunca dejaron de estar a flor de piel con dada capitulo.
La verdad es que no puedo hablar nada del contenido, aun me encuentro en estado de shock, he tenido un buen sabor de boca y sinceramente afirmo que lo leeré por segunda o quizá una tercera vez.