Nos adentramos a esta historia a ciegas y es lo que realmente recomiendo para que el impacto de su originalidad tenga más fuerza. Así que os voy a contar poco del argumento, salvo que es un thriller. Narrado con un lenguaje coloquial y sencillo, nos coloca en escena unos personajes atípicos. Muerte y depravación podrían resumir perfectamente la novela. Crudeza, sangre y violencia. Y sexo. Un libro fuerte, duro, con momentos difíciles de digerir. Una lectura muy diferente a las que suelo acometer pero que me ha gustado mucho. Sin embargo no puedo dejar de decir que hay que estar dispuesto a sumergirse en una atmósfera de violencia extrema y a episodios no aptos para estómagos fácilmente ulcerosos y mentes sensibles. |