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Carlos Busqued narra sus charlas con un asesino (serial?) y entre ambos, con sus preguntas y respuestas recrean la vida y los pensamientos de quien está privado de la libertad por más de 30 años. Es un viaje al consciente e inconsciente de una persona que se observa a sí mismo, según su etapa como una cucaracha o un monstruo, pero que nunca pierde (o no parece perder) la ingenuidad acerca de porqué matar. Busqued se metió en la mente de un asesino de taxistas, y navegó por la misma con solemnidad preguntando todo lo que uno querría saber, y Ricardo el entrevistado contando todo, o casi. Excelente novela
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