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Raquel habla de ella, de sus experiencias y sentimientos. Se nota que escribir estos textos ha sido una vía de escape a todo eso que tenía en la cabeza, una forma de quitarse ese peso de encima. Y la entiendo, porque yo también lo he hecho más de una vez, ya fuera en forma de fanfic, historia, poesía, textos cortos e incluso en forma de diario. Es más, lo sigo haciendo, por los motivos que sean. Así que, este diario es una especie de diálogo que tiene la autora consigo misma. Algunos poemas son algo confusos, seguramente porque para Raquel tenga un significado especial que nosotros no podemos saber, básicamente porque no somos ella y me imagino que esos pequeños detalles se los guarda para sí. También, hay veces que resultan repetitivos y llenos de contradicciones, y no lo digo como algo negativo. Me explico: cuando los pensamientos negativos invaden nuestra cabeza y no nos dejan pensar en otra cosa, estos se vuelven confusos, se entremezclan y los escuchas en tu cabeza, cada vez más alto para imponerse sobre los otros. Esto es lo que me han transmitido alguno de los poemas, esa lucha interna que tenemos con nosotros mismos cuando el corazón nos dice una cosa y la cabeza, lo contrario, cuando hay algo que no queremos admitir aunque en el fondo sabemos que es cierto. Casi las tres cuartas partes de la compilación, hablan del desamor y la verdad es que se hace un poco pesado y pesimista. Sabía que iba a encontrarme con esto, lo que no esperaba es que se extendiera tanto teniendo en cuenta lo larga que es la antología. Lo bueno es que nos hace darnos cuenta de muchas cosas. A ver, todos hemos sufrido por amor en algún momento de nuestra vida, ya fuera por amor de pareja, familiar o de amistad, así que es fácil que nos sintamos identificados con lo que cuenta Raquel. También nos puede afectar un poco más si somos de tener autoestima baja. Así que, si estáis pasando por un momento muy crítico, será mejor que busquéis lecturas más positivas. al final parece que empieza a cambiar, que va aceptando la situación y que se quiere más, y esto es algo que me ha alegrado mucho. También se nota que en este proceso de aprendizaje emocional, tiene sus días malos. Una vez más, entiendo cómo ha debido sentirse. Es tontería, no podemos cambiar nuestra forma de pensar de un día para otro, y lo más seguro que no nos salga bien a la primera, que tengamos que intentarlo una y otra vez hasta que lo consigamos. Si pudiera deciros cómo empezar a cambiar vuestra forma de pensar, lo haría, pero no lo sé. No sé ni entiendo cómo he cambiado la mía, casi diría que es un cambio que se ha ido dando solo poco a poco, que se ha moldeado a base de leer/escuchar cosas de todo tipo (desde artículos de la mente es maravillosa, hasta hartarme de ver vídeos de Lavendaire), de pasarlo mal y decir hasta aquí puedo soportar. Aunque creo que lo que más me ha ayudado, ha sido sincerarme conmigo misma, admitir cosas que me rondaban en la cabeza hasta en segundo plano, hacer deporte de forma habitual (sí, aunque parezca mentira, era algo que quería hacer desde hace algunos años) y leer más cosas sobre feminismo. al menos, eso es de lo que soy consciente. Enlace: http://wanderingbookreader.b.. |
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