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La parte más dificil de analizar una novela no es hacer un resúmen de esta, ya que para eso existen las sinopsis. Lo más complicado es saber expresar lo que te ha transmitido, hecho que se vuelve mucho más dificil si ni tu misma sabes como te sientes a respecto. Esto es lo que me pasó al leer esta obra maestra de la lituretura clásica. No supe identificar a qué respondía la intensidad de los sentimientos que me nacían, si eran algo positivo o negativo. Tenía que dejarlo reposar, pero estaba convencida de que había caído rendida a los pies de esta historia, de eso estaba segura. Nunca me había pasado antes que me enamorase de un libro cuyos personajes me causaran rechazo casi en su totalidad. Pero no era un rechazo por estar mal costruidos ni por resultar prescindibles. En absoluto. Quizás no sea esta la palabra más adecuada, tal vez la palabra que defina lo que me hacían sentir es frustración. Frustración por su carácter, por su manera de enfrenar sus sentimientos y como estos les desbordaban. Estamos ante una novela de la que se tiene una idea errónea, creyendo que en ella encontraremos una historia romántica y dulce. Nada más lejos de la realidad. Nos encontramos con personajes que han sido educados para tener comportamientos egoístas, para despreciar, para manipular. Personajes que, por nacer en la cuna que lo han hecho, se piensan con derechos por encima de los demás, haciendo que el resto de personas a su alrededor entiendan que deben vengarse, humillar y devolver cada desprecio. Cada persona de la novela tiene una motivación, fundamentada o no, para hacer daño a quien le rodea, utilizando los medios o las personas que necesite a su paso. No saben encauzar sus sentimientos para alcanzar la felicidad. Enlace: https://libroalalba.blogspot.. |
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