Lo leí hace mucho y recuerdo haberme reído un montón con las ocurrencias y respuestas de Silvia, y en más de una ocasión le habría dado un guantazo a Daniel, pero bueno, el chico estaba confundido y se lo vamos a perdonar, porque en el fondo es un hombretón maravilloso. Me ha encantado la trama, porque a pesar de parecer, en parte, un poco surrealista, no lo es tanto, porque como bien señala la autora en su nota final, estas cosas pueden pasar... también me ha gustado que Silvia sea una chica normal, y con los problemas que todo eso conlleva, pero que se enfrenta a la vida y a lo que haga falta, para salir adelante y criar a su pequeña
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