Este libro encierra más de lo que parece. Encontramos varios géneros, también mucha crítica a los libros que se venden como churros y a escritores con talento discutible. Me gustaría enumerar lo que me ha gustado y lo que no, aunque he de decir que algo me puedo dejar, seguro. Lo que me ha gustado: Este libro tiene 192 páginas y 5 capítulos y en cada uno parece haber una historia diferente que acaba uniéndose a la principal. Es una historia ambiciosa que consigue que quieras saber qué pasará a continuación. Hay crítica a ciertos géneros y escritores, de forma irónica. No paran de suceder cosas y ocurrir giros en la trama, cosa que valoro mucho. Un punto que me gusta analizar siempre es si el título tiene sentido al acabar, y he de decir que sí. La parte que explica todo esto, me parece además recomendable, en muchas ocasiones, para gente no muy aprensiva. Lo que no me ha gustado: A veces me he sentido perdida en la trama. Creo fielmente que por culpa mía, porque creo que el autor juega con referencias a la literatura universal que yo no controlo tanto. La parte que explica el título ha causado amor-odio conmigo precisamente por ser aprensiva. Ningún personaje me ha llegado especialmente y me habría gustado entender más al prota. Me chocaba, a veces, el uso de palabras argentinas, porque me sacaban de la historia, aunque no lo veo algo tan negativo. En resumen, es un libro corto e intenso. Quizás a mí no me ha gustado tanto como esperaba, pero es el típico libro que leerías en dos tardes y estarías pendiente de qué ocurriría a continuación. |