Hoy os traigo mi última lectura de febrero. Miquel, uno de los miembros de la Tinya, una organización de huérfanos que se dedican al hurto y al intercambio de información. Él nunca supo lo que era tener una familia y lo más cercano a ello era Victor, su padrino para entrar en la organización. Un día Victor aparece asesinado y no parece un ajuste de cuentas ni una reyerta por las circunstancias en las que el cuerpo fue hayado y, aunque la Tinya, no le da más importancia que a la de cualquier muerto más, Miquel no está dispuesto a dejarlo pasar y se adentrará en una investigación para descubrir quien está detrás de todo y cumplir su venganza. He disfrutado mucho de esta historia, me ha gustado la forma de narrar del autor que me atrapó desde el comienzo, la ambientación y descripciones me han parecido maravillosas y te transportan completamente a esas calles de una Barcelona aún amurallada. En cuanto a la trama, también me ha gustado mucho como va avanzando y como vamos descubriendo todo lo que se esconde tras el asesinato de Víctor y como van surgiendo alianzas nuevas que se unen a la investigación. En resumen, una buena lectura parar cerrar el mes y que me deja con ganas de volver a leer al autor. |