El hedonismo es un concepto que puede llegar a ser escalofriante, y el maestro Clive Barker sabe perfectamente como explotar todo esto con terrorífica ironía que se desarrolla lentamente en esta historia que, si no habéis leído, es una obra de culto. La caja de Lemarchand es una puerta dimensional hacia los placeres más venenosos que puedes encontrar, y se pone de manifiesto con los que reciben a aquel que logra resolver su intrincado enigma. Los Cenobitas. Fanáticos de un culto que atraen a aquellos que resuelven dicho cubo hacia una dimensión paralela donde todo lo que anhelan en vida se convierte en un sádico baile de todo lo hórrido del pensamiento humano. Todos esos deseos, como el placer, el dinero o la felicidad, se convierten en oscuras e intrincadas amalgamas irónicas. No hago mucho más spoiler. En líneas generales debo puntualizar la increíble habilidad de Barker para convertir el horror del sufrimiento y la transfiguración humana en algo superior. Se habla y se toca mucho el género del body horror, que es algo sumamente perturbador. La lectura es ligera, ágil y nada pesada de leer. El narrador es en tercera persona, dando detalle de absolutamente todo en la novela. Hubiera deseado un final un poco más elaborado, pero me ha gustado mucho y en ocasiones me he sentido aterrado. 4/5 |