Me cayeron muy bien los personajes, cada uno cumple un rol que se han impuesto: Karl es quien desea dedicarse a la investigación y se autonombra el "Sherlock" del caso; Ian, al apellidarse Watson, no le queda más que ser el comparsa; Irena, por su mismo nombre de pila, será quien dé la mayor revelación para la solución. En cuanto a los adultos, los dos investigadores permiten que los tres jóvenes cooperen en la investigación, los escuchan y los toman en cuenta. Los padres de los chicos también les dan su espacio y su voz es escuchada. Me gustó mucho que al final se aclara con detalles todo lo sucedido en el caso, porque yo soy el tipo de lectora que le gusta esperar a la solución, no me gusta tratar de adivinar quién fue el culpable. |