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Esta historia comienza con Maria sobrepasada de su propia vida y sus decisiones que siempre le llevan por el mal camino. La única oportunidad para huir de las tentaciones de la ciudad es la oferta de trabajo que le hace el cura cuando va a confesarse, y partir de ahí emprende su viaje a Traspadejo. Allí espera encontrar a su jefe, quién no supone ningún peligro, y una granja con animales donde trabajar. Lo que no esperaba es que el novio de la sobrina del jefe vaya a ser su compañero, no puede apartar la vida de él. Sus planes no van a ser tan sencillos como esperaba. · Desde el minuto uno esta historia te absorbe, emprendes el viaje con Maria y vas descubriendo Traspadejo y sus habitantes tan peculiares, cada uno tiene lo suyo, son únicos. Maria es bruta, atrevida, divertida y Leo es reservado, intenta marcar límites y su situación personal hace que no esté en su mejor momento, aún siendo polos opuestos ambos se sienten atraídos, pero no es el momento adecuado. Todos y cada uno de los secundarios son una auténtica locura y las aventuras son surrealistas. Maria es capaz de hacer posible cualquier cosa. En ocasiones he sufrido por Leo cuando Maria se ponía intensa, también tengo que decirlo. En resumen, una historia divertida a más no poder, con mucho salseo, un pueblo remoto y personajes disparatos. La risa está asegurada. |
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