Metanoia

Sinceramente, cuando se presente la lista de libros a escoger en Masa Crítica, Metanoia no fue de los libros que primeramente llamaran mi atención para seleccionarlos, pero ha sido todo una sorpresa ¡y de las buenas!


Se narra en un futuro no muy lejano donde todo lo que conoces actualmente ha explotado, y todo ha ido a mal.
En un principio esta idea me resultó muy atractiva, ya había leído libros con un argumento de distopía futura y siempre lo había disfrutado mucho, sin embargo, teniendo en cuenta las revelaciones recientes que se han hecho sobre la actualidad, este futuro que se presenta en el libro me ha causado hasta ansiedad de imaginar que realmente podría pasarnos a nosotros.

Es un libro que se lee en una sentada porque te engancha desde el principio, es de esos que los capítulos no son muy largos y la última frase de cada uno te deja con ganas de más y más hasta que lo terminas y eso que no te encuentras con una evolución tremenda de los personajes (tampoco creo que sea lo que se pretendía) pero sí encuentras (o al menos yo) un mensaje muy claro que evidencia la queja sobre la mala gestión de las altas esferas en temas sociales, ambientales y el egoísmo de estos, haciendo lo que sea necesario por seguir ocupando sus lugares privilegiados a costa del resto de humanidad, que siguen siendo los que sufren.

Es un grito bastante claro para que se tomen cartas en el asunto en relación con la emergencia climática, presentándonos escenarios bastante creíbles y estremecedores de en qué nos podemos convertir de no ser así.