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La historia nos sitúa en la isla de Tenerife, concretamente en Garachico, a la que llega Roman, un escritor tras la huella de un artista y vecino de dicha población: Arnaldo Vergara también conocido en el mundo del espectáculo de Puerto de la Cruz como "Trinitaria Queen" y que se suicidó en los años 80, en el mismo lugar donde también habían fallecido sus padres siete años antes. Roman quiere escribir su biografía y para documentarse se aloja en Caracas, una pensión de esta población. Según avanzamos en la novela, el autor nos muestra el día a día del escritor en la isla y cómo éste se va encontrando con que, además de que la muerte de Arnaldo parece ser un tema tabú y cuya mención parece que trae mala suerte, dicha muerte también empieza a estar rodeada por pequeños detalles o indicios que la rodean de misterio. Nosotros, cómo lectores, través de los amigos de Arnaldo y sus conversaciones con el escritor vamos conociendo al artista y su personalidad. Al final, un billete de avión guardado durante años, será la clave que nos mostrará la verdadera historia tras esta muerte. Con un lenguaje coloquial y sencillo el autor nos va introduciendo en la vida diaria del pueblo, sus costumbres... Me han gustado los personajes secundarios, bien definidos, que arropan la trama principal: por un lado con un par de historias de amor surgidas poco a poco entre cuatro de ellos, y por otro lado, con una magnífica labor de documentación sobre la historia, no sólo de la isla de Tenerife sino de todo el archipiélago que, el autor nos presenta, poniéndola en boca de Carmelo, conserje de la pensión en la que se aloja nuestra protagonista. Un libro cuya lectura resulta fácil y para nada pesada que mantiene el interés hasta el final. También tengo que decir que a partir de cierto punto en la lectura, intuí cuál iba a ser el final pero no por ello deje de leer para saber si tenia razón o no. |
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