Cathy, la segunda de los cuatro hermanos, será la encargada de contarnos la historia. A través de sus ojos de niña conoceremos a su familia cuando todo iba bien, y veremos como madura precipitadamente con el golpe que les da la vida. A los demás miembros de la familia los conoceremos por la visión que Cathy tiene de ellos y, a pesar de ser información sesgada, nos permite conocerlos bastante bien y ver su evolución. Toda la historia tiene un ritmo rápido de lectura, con las descripciones justas y sin abusar del pensamiento interior de la narradora, aunque es en las últimas 200 páginas donde se concentra la acción, ya que conoceremos un montón de secretos. En una historia dura, oscura, inquietante, que pone la piel de gallina en más de una ocasión, y que hará que te plantees muchas cosas: ¿Hasta dónde puede llegar una persona para mantener su estatus económico? ¿En qué momento perdemos la confianza en alguien? ¿La esperanza de verdad da fuerzas? ¿Qué estaríamos dispuestos a hacer por sobrevivir? |