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Este tercer libro nos mete de lleno, no sólo en al lucha entre los rebeldes y el Ciudad central, sino en las disputas entre la propia resistencia. Tras descubrir los planes de una parte de estos, de volar por los aires la capital, Feigha, Caleb y los suyos, tratan de frenar a la rama más radical de los rebeldes. Pero Feigha ha sido atrapada por ellos y si no colabora, su vida puede correr peligro... Por otro lado Kage ha secuestrado a Naga por orden de Anne, para poner en jaque a Hawk. El agente secreto cruzará todos los límites con tal de recuperarla. Pero mientras tanto, en compañía de Kage, Naga está descubriendo un mundo inmenso de secretos, que desconocía. Violencia, traiciones, ataques y multitud de giros, es lo que nos espera en esta trepidante tercera entrega de la saga. A pesar de sus más de 700 páginas, no se me ha hecho nada pesado y auqnue la primera parte, igual se podría haber acortado un pelin, la verdad es que me ha tenido totalmente enganchada. En esta entrega, Caleb y Feigha le ceden el protagonismo a Naga y Kage y para mí, la trama de estos dos, con todos sus piques, ha sido lo mejor de toda la saga, les he adorado. ¿El final? de infarto. No sé puede describir de otra manera. Llega un punto en el que todo se precipita y es una detrás de otra. No puedes dejar de leer. Además el giro final me ha dejado loquísima, no lo esperaba para nada. Si os gustan las distopías con múltiples tramas y mucha acción, tenéis que viajar a Wëila. |
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