Es un conmovedor relato que explora las vivencias del abuelo del autor en el campo de concentración de Mauthausen durante la Segunda Guerra Mundial. A medida que avanzamos en las páginas de esta narrativa emotiva, somos testigos de la lucha implacable por la supervivencia en medio de la brutalidad y la inhumanidad que caracterizaban a esos campos. Sin embargo, este libro no se limita solo a relatar los horrores del pasado. También se adentra en el proceso de sanación y reconciliación del autor a medida que reflexiona sobre el impacto duradero de la experiencia de su abuelo en su propia identidad y en la de su familia. Es un tributo a la resiliencia humana y una llamada a recordar y aprender de la historia para construir un mundo más comprensivo y humano. No obstante, si tuviese que comentar algún punto "negativo" bajo mi punto de vista sería el prólogo, considero que es una introducción demasiado larga y puede hacerse un poco pesada aunque la información que contiene sea interesante. |