«Una infancia feliz, a fin de cuentas. Pese a su asquerosa y miserable madre» Ha sido curioso, no esperaba lo que me he encontrado, tras leer la sinopsis, y recordando algunas de mis anteriores lecturas, me hice una idea errónea, llené esta lectura de expectativas, que no se vieron cubiertas, porque no intenta dar respuestas, creo. Eso sí, no deja de ser una lectura que perturbadora. Puedo pensar que esa bala fue la causa de todo, pero el caso de Griselda es dolorosísimo, que se hubiese podido evitar si Claudio hubiese observado con más interés a esa mujer que desde el umbral de la puerta le decía «No me siento bien», que él podría haber medido su respuesta «¡Fuera de aquí, carajo!», quizá el desenlace sería otro y Flavia tendría otra historia muy diferente a sus espaldas. |