Jaime siempre me sorprende con su maravillosa capacidad de hacerme partícipe de sus historias. Es como abrir el libro e inmediatamente te verás transportado al interior de sus páginas. En este caso me sentí regañada por Betito, pues mientras él como personaje principal nos narraba su vida y aconsejaba al mismo tiempo no manchar las hojas del libro, yo andaba leyendo mientras comía una rebanada de pastel con mi vaso de leche. ( Así es humanos lectores, me gusta el pastel con leche y no me avergüenza contarlo). Suerte para mí que soy super cuidadosa con mis libros y mi ejemplar de "Padres padrísimos S.A." resultó intacto y sin ninguna mancha. Ahora, hablando de la lectura y mi impresión con el libro, la narración, la historia y los personajes, les puedo contar que me ha gustado bastante. Beto Barajas me recuerda a mis alumnos de primaria, quienes siempre me hablan de sus padres, los que son ejemplares y los que resultan ser los peores papás del universo. He conocido bastantes de ellos. Ahora, desde mi perspectiva y bajo mi experiencia con los míos, puedo decir que leyendo a Beto me ha llegado el sentimiento y quiero correr con mi mamá y decirle que ¡La amo y la extraño! porque vivimos en diferentes países. Y vaya que es difícil crecer y alejarte de tus padres. También quisiera regresar el tiempo y abrazar más a mi papá, decirle cuánto lo quiero y aprecio todo lo que hizo por mí y mis hermanos y aunque la vida me lo arrebató demasiado pronto siempre lo tendré en mi corazón. ¡Ay, ya estoy llorando! Creo que Betito y yo somos bastante sentimentales. Por algo nuestros nombres inician con "B" ... Crearemos "El club de las lágrimas" y seremos deprimentes. Después platicaremos de nuestros errores y contaremos su historia a todo el mundo para que valoren a sus padres como deberían y no sean tan perversos. Gracias Jaime por crear historias como estas. ¡Por favor, nunca dejes de escribir! |