La Débâcle de Émile Zola
Juan se negó a hacer lo que le pedían. ¡Aquel pobre animal que agonizaba! ¡No, no! Su primer pensamiento fue huir con Mauricio para que ni uno ni otro tomaran parte en aquella horrible matanza. Pero al ver tan pálido a su compañero tuvo lástima de él. Después de todo, se dijo, los animales se han hecho para que los coman las personas
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