La señora Stendhal de Rafel Nadal
En el pueblo los mandamientos de la ley de Dios eran dos: Sabater y Ros. Antonio Sabater y Pere Ros. Eran propietarios de la mitad de las tierras, se alternaban en la alcaldía, aplicaban leyes a su conveniencia y se aseguraban el control del pueblo. Únicamente ellos regaban los campos y las arboledas gracias a un derecho de uso sobre el agua del canal que alimentaba la hidroeléctrica de los Ribot. Isidre Ribot era el único que los superaba en fortuna, pero vivía en la capital y apenas se interesaba por los asuntos del pueblo. De manera que Sabatel y Ros hacían lo que les daba la gana...
|