Orlando Araujo
Ciertamente, yo no la conocía aunque tal vez la amaba; y por fieles investigadores que trabajaran arduamente para mí, supe que ella tampoco me conocía aunque tal vez me amaba; en fin, la duda era casi un país.
|
Orlando Araujo
Ciertamente, yo no la conocía aunque tal vez la amaba; y por fieles investigadores que trabajaran arduamente para mí, supe que ella tampoco me conocía aunque tal vez me amaba; en fin, la duda era casi un país.
|