Octavio Paz
BLANCO el comienzo el cimiento la simiente latente la palabra en la punta de la lengua inaudita inaudible impar grávida nula sin edad la enterrada con los ojos abiertos inocente promiscua la palabra sin nombre sin habla Sube y baja, escalera de escapulario, el lenguaje deshabitado. Bajo la piel de la penumbra late una lámpara. |