The Raven King de Nora Sakavic
Finalmente, Riko sonrió. Fue una expresión horrible, pero no tan mala como las palabras que la siguieron. —Nathaniel, ha pasado tanto tiempo. El miedo de Neil era caliente y espeso en su pecho. Apenas podía respirar a su alrededor. Rezó para que su expresión no lo delatara incluso cuando sabía que era demasiado tarde. —Mi nombre es Neil. |