Conjuro de noches y estrellas de Nerea Llanes
La oscuridad que llenaba su cabeza. Siempre luchaba contra ello: las voces que lo llamaban, las pesadillas, el poder que ansiaba tomar el control de su cuerpo, que le suplicaba. Llevaba luchando contra ello desde que tenía memoria. Pero aquel día había perdido el control: la oscuridad lo había cegado, había sentido un rugido en los oídos.
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