Historietas, cuentos y fábulas de Marqués de Sade
Las cadenas nunca sirven para nada; en tales casos se guarda silencio, no se priva a los inculpados de su sangre y de su dignidad; esos procedimientos odiosos (la tortura) son mucho más deshonrosos para quienes los ponen en práctica que para sus víctimas; se hacen acreedores a su rencor, provocan un escándalo y nada se ha reparado.
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