La eterna complaciente de Lidia Herbada
cada vez pienso que la vida está hecha de proyectos personales, más allá del marido y los hijos, si solo te centras en eso, el dolor te acaba devorando.
|
La eterna complaciente de Lidia Herbada
cada vez pienso que la vida está hecha de proyectos personales, más allá del marido y los hijos, si solo te centras en eso, el dolor te acaba devorando.
|