En marzo se peinan las brujas de Laura Caldarola
Si fuera dueña de una ciudad, haría que los hospitales fueran alegres, más parecidos a los hoteles que a hospitales, para que la gente enferma pudiera sentirse menos triste, para que disfrutaran de la estancia y guardaran un bonito recuerdo, que será para esta vida o para la próxima.
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