El reino de los malditos Vol. 3 de Kerri Maniscalco
—Es imposible replicarte. Le dirigí una mirada sardónica. —Tengo una gemela. —Eso da igual. Siempre te reconocí. Y siempre lo haré. Tu alma llama a la mía. La sensación es como la de volver a casa. De paz. Ninguna magia puede duplicarla. |