La Grulla Doliente de Kanoko Okamoto
Yo, al observar la deplorable figura de aquella grulla que parecía querer desvanecerse de inmediato, sin poder evitarlo, me acordé del Sonosuke que vi en el ferrocarril. "¿Estará también, esta doliente grulla, al borde de su sino aciago?". Yoko, envuelta en tal sentimentalismo, cayó abatida.
|