Un cura casado de Jules Barbey d'Aurevilly
El castillo del Quesnay, que es necesario que ustedes conozcan como un personaje -dijo Rollon-, ya que se trata del teatro de esta historia, había pertenecido desde la noche de los tiempos a la secular familia de ese mismo nombre. Estaba situado, porque ya no existe -y este relato les dirá por qué-, en la región más alejada, la más profunda de la baja Normandía.
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