Los desiertos por habitar de Jesús Roldán Fariñas
Es una sensación extraña…, sé que he muerto, que se acabó todo. Pienso en mi hija, en mi mujer, en mis padres, y lo siento por ellos, pero no por mí. Yo no necesito volver, esa paz que siento en ese instante me atrapa y quiero quedarme instalado en ella para siempre.
|