Esperando a los bárbaros de J.M. Coetzee
La señal no llegó. No experimenté el miedo de estar ante espíritus. Mi asiento en la arena era cálido. Al poco tiempo me di cuenta de que me estaba durmiendo.
|
Esperando a los bárbaros de J.M. Coetzee
La señal no llegó. No experimenté el miedo de estar ante espíritus. Mi asiento en la arena era cálido. Al poco tiempo me di cuenta de que me estaba durmiendo.
|