Bajo Bandera de Guillermo Saccomanno
Cuando llegamos al cuartel Rosen fue asignado a la oficina de Intendencia. Cabezón, bajo, morrudo, como un pequeño rinoceronte rubio, mirando siempre oblicuo o desde abajo con sus protuberantes ojos de muñeca, Rosen se empecinaba en acentuar la imbecilidad de su sonrisa babosa.
|