Refugio del Viento de George R.R. Martin
Y de repente la rodeó la paz. La calma y la muerte. El viento dejó de soplar y la lluvia se detuvo. El mar dejó de ondularse salvajemente. Las propias nubes parecieron retroceder hasta encontrarse infinitamente lejos. La rodeó un silencio sobrecogedor, como si el tiempo se hubiera detenido para tomar aliento. |