Poesía castellana de Garcilaso de la Vega
Con ansia estrema de mirar qué tiene vuestro pecho escondido allá en su centro y ver si a lo de fuera lo de dentro en aparencia a ser igual conviene. en él puse la vista, mas detiene que vuestra hermosura el duro encuentro mis ojos, y no pasan tan adentro que miren lo que el alma en sí contiene. Y así se quedan tristes en la puerta, hecha, por mi dolor, con esa mano, que aun a su mismo pecho no perdona; donde vi claro mi esperanza muerta y el golpe, que en vos hizo amor en vano, non esservi passato oltra la gona. |