En verso y prosa - Antología de Gabriela Mistral
-Yo tampoco odio ya -dijo ella-, y soy roja como una herida porque he padecido, y me pusieron junto a ti porque pedí amarte. -Yo te quisiera más próxima -respondí-, sobre mis brazos, los que nunca te estrecharon. -Yo te quisiera -respondió- sobre mi corazón, en el lugar de mi corazón que tuvo la quemadura de tu odio. |