Poesía completa de Elsa Cross
En la fuente nos hemos sumergido. A su corriente dejamos nuestros cuerpos como bancos errantes, tierra que se desprende llevándose la orilla de espadañas. Fluimos por sus transparencias y en el fondo de ese lecho nuestras piernas rozaban un musgo suave. Plantas se enredaban a los pies. Sentíamos el paso de esos peces que a un descuido, decían, se pegaban entre los muslos de las mujeres. Y todo el tiempo una frase en los oídos pulsando al límite sus cadencias más altas. Río abajo veíamos las ramas contra el cielo. El sol dibujaba en nuestros cuerpos la sombra de las hojas. La brisa traía tu olor. Pasamos bajo un sauce y sus ramas detenían de los cabellos todo ese impulso río abajo. |