De hogares de acogida y moscas de Chad Lutzke
Se me agarrota la garganta y trago con fuerza. Comienzo a llorar. No por mamá, sino porque me doy cuenta de que, por primera vez en mi vida, creo en mí mismo.
|
De hogares de acogida y moscas de Chad Lutzke
Se me agarrota la garganta y trago con fuerza. Comienzo a llorar. No por mamá, sino porque me doy cuenta de que, por primera vez en mi vida, creo en mí mismo.
|