Un amor borravino de Camilla Mora
-Tú tienes tus fantasmas y yo, mis demonios. Ya no espero tanto como cuando era más joven, lleno de sueños. Cuando llegué a este país, pensé que todo lo que había sufrido era para arribar a ese estado de felicidad; poco después, me di cuenta de que era solo un espejismo tras el que había otro manto de dolor que sobrepasar, un escalón más para llegar a ese lugar. -¿Se llega alguna vez? -Eso no lo sé, Willow. Pero ¿qué sería de nosotros sin la esperanza? |