LIBRO CENTROAMERICANO DE LOS MUERTOS de Balam Rodrigo
Pero las aguas de los ríos siguen su rumbo hacia el mar, cruzan esteros y meandros en los que descansan cuerpos hinchados, troncos incompletos de cadáveres, reses perdidas y migrantes, hijos clandestinos de países sin pájaros que viajan con los sueños enjaulados y son arrojados a las fosas comunes, y mueren sin nombre, sin eco como una paletada más de una tierra que sella su destino y hace callar esa palabra de amor que nadie más podrá escribir ni pronunciar en sus labios. |