Caótica Jimena de Andrea Longarela
Solo necesitaba estar lejos de él, lejos de su objetivo, lejos de aquella mirada que, incluso sin cámaras, era capaz de mirar dentro de mí. Lejos de toda esa intensidad que era Bruno y que había conseguido que algo hiciera clic en mi interior, como un disparador en lo más hondo de mis tripas.
|