EL HADO PADRINO de Anaïs Baranda Barrios
Calisto se puso junto a Lucila de un salto con una gran sonrisa en la cara. Le explicó que habían recibido su solicitud y le habían asignado su caso como primera misión de Hado Padrino. Las hadas eran, en general, un poco crueles con él y no confiaban mucho en sus capacidades.
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