Alexander Von Humboldt
No fui creado para ser padre de familia. Además, considero el matrimonio como un pecado, la procreación de los niños como un delito. Es también mi convicción, que aquel que carga el yugo de la vida conyugal es un necio y más aún un pecador. Un necio, pues con esto se deshace de su libertad sin ganar una correspondiente compensación; un pecador, pues les da la vida a los hijos sin poder darles la certeza de la dicha. Desprecio a la humanidad en todos sus estratos; preveo que nuestros descendientes serán aún más desdichados que nosotros: ¿no debería ser un pecador si a pesar de esta visión engendrase hijos, es decir, seres infelices? |