Si rompemos las barreras de Alba G. Callejas
Sentía que una parte de su corazón se quedaba con Izan, pero también que una parte de él se había alojado en su corazón, con la misma persistencia que su olor se había clavado en sus sentidos.
|
Si rompemos las barreras de Alba G. Callejas
Sentía que una parte de su corazón se quedaba con Izan, pero también que una parte de él se había alojado en su corazón, con la misma persistencia que su olor se había clavado en sus sentidos.
|